Un ejemplo de icono

Ángela Maritza Borja es una de las 200 jóvenes ibaguereñas becadas por la Administración Municipal, para formarse como técnico profesional en servicio de Policía. Su capacitación la llevó a cabo en la Escuela Rafael Reyes, en Santa Rosa de Viterbo, Boyacá; y hace una semana llegó a Ibagué, para integrar el pie de fuerza en la Capital Musical.

A través de las redes sociales de la Alcaldía de Ibagué, se enteró de la convocatoria pública para que jóvenes vulnerables pudieran acceder a este beneficio, y ella, una habitante del barrio Nueva Castilla, ahora es la única Policía en su familia.

“Muy contenta porque no todos corren con la fortuna de volver a laborar en su ciudad y estar cerca de la familia. Tiene varios beneficios, su vivienda, su alimentación, un tiempo de descanso para compartir con los amigos, seres queridos, es algo muy gratificante que lo motiva a uno a aportar más, a trabajar arduamente”, expresó la joven.

Durante su formación, ella y los demás becados también recibieron los uniformes y demás implementos requeridos para llevar a cabo su labor por parte del Gobierno Local. Ahora, se siente motivada a servir a la ciudad que la vio nacer, contribuyendo con la seguridad y el orden público en las diferentes comunas y corregimientos.

“La verdad muy agradecida, porque es una oportunidad que no todos tienen, es gratificante, aunque uno este becado uno está por un sueño personal, y volver a la ciudad y saber que el Alcalde estuvo muy pendiente del convenio, se cumplió con todo lo que nos prometieron, de la Alcaldía nos hacían acompañamiento, le digo al señor Alcalde que cuente conmigo como una forma de retribuirle el aporte que nos hizo”, concluyó la patrullera.